miércoles, 1 de febrero de 2012

Hurones

LOS HURONES SUPERAN EN INTELIGENCIA A LAS MASCOTAS MÁS COMUNES: PERROS Y GATOS

Jessica Romandini

Tener un hurón como mascota supone una serie de ventajas frente a otros animales más populares, ya que éste no muda tanto el pelo, no hace ruido y puede ser entrenando para que defeque en una caja. A ello hay que añadir su carácter amigable y su inteligencia.
Se puede afirmar que como mascota es excelente, ya que se caracteriza por ser cariñoso, juguetón y simpático. Asimismo, supera en inteligencia a los perros y a los gatos, las mascotas más comunes. Así, es capaz de aprender numerosos trucos y normas que harán más fácil la convivencia con ellos.

Sin embargo, hay que saber antes de adquirir un animal de este tipo, que despide un olor peculiar, que en ocasiones resulta molesto. Para evitar este olor se les extraen las glándulas que lo provocan, por lo que actualmente, muchas tiendas los facilitan ya operados.
El hurón necesita una constante vigilancia, atención y tiempo de su dueño para dedicarlo al juego. No se recomienda dejarlo al cuidado de un niño, ya que éste no le proporcionará la atención adecuada.
Los hurones pueden tener convivencia con otras mascotas siempre y cuando se les introduzca pacientemente. En un principio deberás estar muy pendiente de su convivencia sobre todo cuando se trate de hurones bebés.


Las ballenas azules aumentan más su tamaño

Los animales más grandes que han habitado sobre la Tierra, siguen creciendo de tamaño en un lento proceso evolutivo, según un estudio de científicos australianos divulgado este lunes.
"El animal más grande de todos los tiempos está aumentando potencialmente de tamaño", así lo indicó el biólogo Alistair Evans, uno de los responsables de esta investigación realizada por la Universidad Monash de la ciudad de Melbourne, a la emisora local ABC.


Evans y una veintena de biólogos y paleontólogos calcularon la variación del tamaño de los cuerpos de centenares de animales de 28 grupos de mamíferos, entre ellos, elefantes, primates y ballenas, en los últimos 70 millones de años.

Los investigadores hallaron que las especies que reducen su talla, como el extinto hipopótamo enano, lo hacen a un ritmo diez veces mayor que aquellas que incrementan su tamaño, según un comunicado de la Universidad de Monash.

"La gran diferencia entre reducir de tamaño o crecer es realmente sorprendente, nunca pensamos que iba a ocurrir tan rápido", subrayó Evans, coautor de este estudio publicado esta semana en el Acta de la Real Academia de Ciencia de Estados Unidos.

Así, los científicos descubrieron que la tasa de reducción del tamaño es más rápida que la de crecimiento y, en ese sentido, solamente han tenido que pasar 10.000 generaciones para que se contraiga la talla de los animales hasta el enanismo.


Muchos de los animales miniatura extintos como el hipopótamo enano o el mamut pigmeo habitaron territorios insulares, un contexto que ayuda a explicar su contracción.

"Cuando un animal es más pequeño necesita menos comida y se puede reproducir más rápido, lo que supone una gran ventaja en pequeñas islas", indicó Evans.


Lisbel Rendón